La Joven Orquesta Sinfónica "Ciudad de Salamanca" es, por méritos propios, parte del patrimonio cultural de nuestra ciudad. Joven, pero veterana y con el entusiasmo y la energía de quien hace camino al andar.
Mi afición a la música me la transmitió mi padre, quien tuvo el placer de escuchar a esta Joven Orquesta, y tanto le entusiasmó, que uno de sus últimos artículos publicados fue, precisamente, para ensalzar el prometedor futuro de una formación que todavía daba sus primeros compases.
Como mi padre, yo he tenido la suerte de aprender de estos músicos, tanto presenciando sus ensayos, como, junto a cientos de espectadores, aplaudiendo desde el patio de butacas en sus conciertos. Estos jóvenes se defienden con su musica y con el palmarés que ya acreditan. Desde hace quince años son embajadores culturales de Salamanca y su repertorio abarca desde los clásicos hasta el sinfonísmo más complejo de los siglos XIX y XX. Tienen ya su huella sonora , de la que dan fe sus CDs, pero mantienen viva la ilusión del primer día. La llama que nunca se apaga.
Tuve el placer de decírselo a los jóvenes músicos en uno de sus ensayos en el CAEM y lo repito ahora en esta presentación: nada suena tan bien como cuando sale del corazón y de la ilusión, pero, además, esta Orquesta tiene un mérito que no se encuentra en las partituras: su línes de trabajo centrada en potenciar el valor humano de la música. Por todo ello, nos han enseñado tanto desde el año 1997. Muchas gracias por vuestro ejemplo..
Alfonso Fernández Mañueco
Alcalde de Salamanca